miércoles, 31 de enero de 2007

Cronopios en las 4 plazas

El tráfico es intenso por calle Mendoza a esa hora del día. Yo llevaba caminadas unas cuantas calles desde la Circunvalación, y al llegar a las Cuatro Plazas el verde me inundó las retinas.
La fuente, esa que está frente a la iglesia, lanzaba su chorro con furia tratando de llegar a las nubes que pasaban de largo.
Los árboles, frondosos a esta altura del año, calmaban con su sombra la calurosa impronta de un sol que se empecinaba en hacerse sentir.
Cuando estaba por cruzar la avenida y mientras giraba la cabeza tratando de adivinar la trayectoria del próximo auto, los ví. Dos hombres jóvenes durmiendo bajo un grandísimo fresno plantado por un viejo y visionario párroco barrial.
¿Quienes serían estos tipos, tirados ahí, despreocupados de todo lo que se movía a su alrededor?
¿Serían trabajadores que descansaban de una extenuante, pero breve, jornada de trabajo?
O serían, tal vez, dos parroquianos que sucumbieron al sopor alcohólico adquirido en algún bar cercano?
Mis prejuicios iban ganando mis pensamientos mientras cruzaba la calle y los miraba de lejos.
La envidia también asomó por mi mente, pensando en la placidez de esos individuos en medio de la vorágine de la ciudad en una mañana cualquiera.
Seguí caminando mientras las incógnitas y sentimientos se agolparon de pronto, esfumándose cuando el paisaje de otra cuadra se presentaba frente a mi.

martes, 9 de enero de 2007

IMPREVISTOS (cuento brevísimo)

Entró corriendo, agitado.
La cena, que estaba servida en la mesa, aún humeaba.

viernes, 5 de enero de 2007

DIAS DE ENERO


Enero en Rosario.

Eso sí que no es joda.

Claro, que si no tenés que laburar te podés ir al río o a las islas y está todo bien. Podes disfrutar de las mujeres rosarinas y hasta quizás levantarte alguna.

Los otros, estamos mirando el almanaque día tras días, haciendoles tachaduras con la mente y alentandonos cada mañana al despertar con la cuenta regresiva de los días que faltan para nuestras vacaciones.

Enero en Rosario, y si podés tomate una cerveza al lado del Paraná.

Eso sí, ni se te ocurra olvidarte del Off!